lunes, 10 de junio de 2013

CARLOS II

CARLOS II, EL HECHIZADO

  Carlos II, hijo de Felipe IV y Mariana de Austria, el menor de los hijos varones, sus cuatro hermanos mayores murieron, y solo quedaron vivos su hermana Margarita Teresa y él. Rey de España y Sicilia. Nació el domingo 6 de noviembre de 1661, la Gazeta de Madrid contaba así su nacimiento: “nació un robusto varón, de hermosísimas facciones, cabeza proporcionada, pelo negro y algo abultado de carnes”.
Más crítico con el aspecto de este nuevo infante fue el Embajador de Francia, quien escribió a Luis XIV: “El Príncipe parece bastante débil; muestra signos de degeneración; tiene flemones en las mejillas, la cabeza llena de costras y el cuello le supura (…) asusta de feo”.
   De Carlos II se sabe con casi total seguridad que padeció el  Síndrome de Klinefelter, enfermedad genética que consiste en una alteración  cromosómica.

   Con el fin de que aquel débil muchacho sobreviviera, fue alimentado por 14 amas de cría distintas, que le amamantaron hasta la edad de 4 años, y no se continuó durante más tiempo porque se consideraba “indecoroso” para un monarca. Sin embargo, no pudo sostenerse en pie hasta los 6 años de edad, debido probablemente a un raquitismo por déficit de vitamina D, agravado también por la falta de luz solar, puesto que prácticamente no se sacó al niño al exterior por temor a los enfriamientos. Se sabe también que distintos padecimientos de origen infeccioso minaron la salud del pequeño monarca: infecciones respiratorias de repetición, sarampión, varicela, rubeola y viruela. Además, padeció epilepsia desde la infancia hasta los 15 años, que posteriormente recurrió al final de su vida. Y, por último, no podemos olvidarnos de un evidente retraso intelectual: Carlos II no aprendió a leer hasta la edad de 10 años y nunca supo escribir correctamente. Padecía ataques de cólera desmesurados y tuvo adicción alimentaria al chocolate (chocoholismo).

   Último del linaje de los Austrias, un enfermo desde su nacimiento hasta su muerte, probablemente por la continua endogamia practicada por sus ascendentes:

“Felipe III y Margarita de Austria son, a la vez, sus abuelos y bisabuelos. Su padre estaba casado con una hija de su hermana, por lo que, a la vez, era tío segundo de su hijo y su madre resulta ser prima de  su propio hijo.”


  Carlos II fue proclamado rey en 1665, a los cuatro años, tras la  muerte de su padre Felipe IV .Era una persona educada por teólogos y sin conocimientos políticos. Su mala salud hacía sospechar que moriría joven, por lo que nuevamente se descuidó su educación; nadie se preocupó de prepararle adecuadamente para las tareas de gobierno.

   La Reina, Mariana de Austria, tomó la regencia hasta que Carlos II   tuvo 14 años y se le consideró mayor de edad y por tanto, con capacidad para reinar.

  La Reina  sería asistida por una Junta  de Regencia formada por seis miembros.

Cuando se abrió el testamento de Felipe IV, uno de los miembros de la Junta ya había fallecido, quedaba así vacante el puesto del Arzobispado de Toledo. Su titular, el cardenal Baltasar Moscoso y Sandoval, había muerto sólo unas horas antes que Felipe IV. La reina hubo de buscar soluciones y con la intención de dejar vacante el puesto de Inquisidor General, obligó a don Pascual de Aragón a ocupar el Arzobispado de Toledo. De este modo el puesto de inquisidor quedó libre para ser ocupado poco después por el máximo confidente de la reina: su confesor el padre Juan Everardo Nithard. Así, el padre Nithard llegó a copar puestos de gran relevancia en la monarquía, actuando como un verdadero "valido" al ser casi la única persona en la que la reina regente depositó su plena confianza.

   A pesar de que Felipe IV dispuso en su testamento que se favoreciera a Juan José de Austria, su hijo bastardo  y, por tanto, hermanastro de Carlos II, la reina le excluyó de todo cargo político.

 


   Juan José de Austria luchó denodadamente por conseguir un puesto de relevancia en la Corte, visiblemente desgastado por sus continuadas campañas militares en Italia, Cataluña, Flandes y Portugal. La lucha contra Valenzuela, sucesor de Nithard,  aumentó y, apoyándose en la nobleza, Juan José de Austria marchó sobre Madrid y tomó el poder en 1677. Valenzuela fue desterrado y la Reina madre abandonó la Corte fijando su residencia en el Alcázar de Toledo. Juan José de Austria, con el apoyo popular, se convirtió en el nuevo valido. Su gobierno quedó ensombrecido por la lucha política contra sus adversarios y la dramática situación de la monarquía hispánica, obligada a ceder el Franco Condado a Francia mediante la Paz de Nimega en 1679.

    En ese mismo año, el Rey, de 18 años de edad, se casa en primeras nupcias con María Luisa de Orleans de 17, sobrina de Luis XIV de Francia. Aunque nunca llegó a estar verdaderamente enamorada de su marido, con el paso de los años María Luisa llegó a sentir un genuino afecto hacia él. Carlos, por su parte, amaba tiernamente a su esposa. Ante la falta de sucesor la reina llegó a realizar peregrinaciones y a venerar reliquias sagradas. Finalmente murió en 1689, por una apendicitis aguda, según reveló su autopsia, dejando al rey en un estado depresivo.


     Dada la preocupación por la falta de descendencia, al año de la muerte de María Luisa, se casó con Mariana de Neoburgo. Sin embargo, a pesar de los fértiles antecedentes de ella (los padres de Mariana tuvieron 23 hijos), la descendencia no llegaba. En su desazón, potenciada por las reiteradas simulaciones de embarazo por parte de Mariana, el mismo Carlos sospechaba que un hechizo proferido contra él le impedía engendrar, razón por la cual ordenó en 1698 investigar el tema al Inquisidor General, el Cardenal Rocaberti. Los truculentos peritajes concluyeron que el rey había sido víctima de un hechizo, el cual:

“Se lo habían dado en una taza de chocolate el 3 de abril de 1675, en la que habían disuelto sesos de un ajusticiado para quitarle el gobierno; entrañas para quitarle la salud y riñones para corromperle el semen e impedir la generación”.

Carlos II fue exorcizado mediante una serie de pócimas asquerosas, entre ellas pichones recién muertos sobre la cabeza para evitar la epilepsia y entrañas calientes de corderos para sus procesos intestinales, las cuales sólo lograron empeorar su ya delicada salud. Finalmente, su esposa Mariana se apiadó del pobre enfermo, poniendo fin a los repugnantes remedios y a los embarazos simulados.


    El Rey, plenamente consciente de su incapacidad para asumir las funciones de gobierno, dejó el mismo en manos del duque de Medinaceli (1680-1685) como su valido, y posteriormente en el conde de Oropesa (1685-1691). El último intentó poner orden en la economía y hacienda real, creando para ello la Superintendencia General de la Real Hacienda, presidida por el marqués de Vélez, que, aunque no funcionó como era de esperar, marcó el comienzo de las futuras reformas borbónicas.

  Durante el reinado de Carlos II tuvieron lugar dos guerras contra Francia, En 1684 en Ratisbona se firmó una tregua de veinte años con Francia, tregua que fue rota en 1690 al concluirse una alianza entre España, Inglaterra, los Países Bajos y el Imperio dando lugar a un tercer enfrentamiento bélico que duraría hasta 1697. Los ejércitos franceses ocuparon una serie de plazas catalanas e incluso se apoderaron de Barcelona en 1697. En esta tercera guerra contra el vecino país, España intervino en las filas de la Liga de Ausburgo, junto al Imperio, Austria, Suecia y el Papado. La guerra finalizó con la paz de Ryswick, La primera derrota seria de la política exterior de Luis XIV, que se vio obligado a ceder a España plazas en Cataluña. Flandes y Luxemburgo, mostrando así su interés por conseguir para los Borbones la sucesión al trono español.

   Los años últimos del reinado de Carlos II estuvieron marcados por la locura del monarca, producto de las presiones políticas y las intrigas palaciegas, y por el problema sucesorio, como consecuencia de la inexistencia de hijos. Ante esta última cuestión se avivó una pugna por hacerse con el trono y con su herencia. En un principio, el candidato designado era José Fernando Maximiliano, hijo del elector de Baviera, pero éste falleció en 1699, y volvió a presentarse el problema de elegir entre el archiduque Carlos, hijo del emperador Leopoldo y biznieto de Felipe III, y Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV y de su hermana María teresa de Austria y biznieto de Felipe IV. Esto provocó una


contienda por la sucesión al trono español en la que intervinieron las principales potencias europeas. La Corte se dividió en dos bandos, por un lado la reina apoyaba al candidato austríaco, y por otro Carlos, quien pensaba que sólo el apoyo de Francia podía asegurar la conservación de la monarquía en toda su integridad territorial. Todo esto le hizo decidirse por Felipe, y sin ceder a presiones mantuvo su elección hasta el final dejándolo por escrito el 2 de octubre de 1700 en el testamento que hizo un mes antes de su muerte.

 

El 5 de octubre de 1700, el Dr. Goleen escribe:

“Su Majestad recibió los Sacramentos e hizo testamento el día 2 aunque se ignora su contenido pues se guarda absoluta reserva. La enfermedad es grave pues en pocos días ha tenido más de 200 cursos (deposiciones); perdió el apetito y está extenuadísimo, al punto de parecer un esqueleto”.

Todavía duró tres semanas más. Extenuado, respirando fatigosamente, haciendo sus numerosas deyecciones en la cama y tras dos días en coma, precedido de una fiebre alta, murió el día l de noviembre de 1700. Sus últimas palabras fueron, en respuesta a una de la Reina: “Me duele todo”.


  Por tanto, Carlos II, último de los Habsburgo españoles, expiraba en Madrid, a la edad de 38 años, Según el médico forense, el cadáver de Carlos “no tenía ni una sola gota de sangre, el corazón apareció del tamaño de un grano de pimienta, los pulmones corroídos, los intestinos putrefactos y gangrenados, tenía un solo testículo negro como el carbón y la cabeza llena de agua”, dejando un testamento sucesorio que provocaría una guerra, la guerra de sucesión que daría paso a una nueva dinastía en la monarquía de España, la de los Borbones.

 Carmen Andrés serna

 

 


 

 

 

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